Posted by : MAKUTEROS julio 14, 2013


Makuteros Family Run - China - Yangshuo - Guilin

Viajar a CHINA - Yangshuo

Llegamos a Yanshuo, sur de China, a una hora en bus de Guilin, a las 10 de la mañana. Un poco cansados, después de pasar 23 horas metidos en el tren que nos trajo desde Kunming (soft sleeper - máxima categoría). Habíamos leído que este antiguo pueblo de pescadores a orillas del rio Li, que ahora tiene la misma población que Granada, era una maravilla. "efectiviwonder". Decidimos pasar aquí las última semana de las vacaciones chinas antes de llegar al puerto de Hong Kong. Nuestro hotel, un poco alejado del centro del pueblo, ofrecía habitaciones, con decoración rococó, con vistas a la montañas. La verdad, es que como era el hotel más caro que habíamos reservado en China (52 euros noche los 4),  esperábamos más, pero la amabilidad del personal, una cama super cómoda, buena conexión a Internet y sus útiles consejos a la hora de reservar actividades nos hicieron ratificarnos en que habíamos acertado con nuestra elección de alojamiento. Coincidimos con una pareja de españoles, residentes en Bélgica, y una pareja de profesores de Móstoles. Así que los "spanish" hicimos piña en este hotel y compartimos cenas y tertulias.


Makuteros Family Run - China - Yangshuo - Guilin
Yangshuo es un destino turístico para los chinos y llegamos en temporada alta, así que, la calle principal (West Street), era un hervidero de gente por la noche, pero fuera de eso se respiraba un aire mas sosegado que en el resto del país. También es el lugar donde encontramos mas extranjeros de todo el viaje, aunque tampoco para echar cohetes. Hay tanto turismo interno en China que, los extranjeros, somos un grano en un arrozal para la industria turística del país. De hecho, creo que es el primer país de Asia donde, cuando bajas del bus o sales de una estación de tren, los "captadores de turistas", que buscan venderte alojamiento, un taxi o una excursión,... pasan olímpicamente de los guiris que llegamos y "acosan" solo a los turistas chinos, que como digo son muchos muchos.










Yangshuo ofrece muchas actividades de ocio: visitar cuevas, paseos en barca de bambu (ahora de pvc imitando la forma de los troncos de bambu) por el río, pesca nocturna con cormoranes, rafting, senderismo, .... Los precios son mas económicos que en Europa, pero tampoco es un chollo, aunque siempre hay descuento para niños (Mateo gratis y Candela el 50% o gratis).



Decidimos alquilar un par de motos, tres días, para ir de ruteo por la zona. Alquilar cada moto nos costo 15 euros por día (incl la gasolina, eran de 125cc), nada barato acostumbrados a pagar entre 5 - 7 euros día por moto en otros viajes que hemos echo x Asia. Recorrí 5 sitios de alquiler en el pueblo, para ver si podía encontrar mejor postor, pero todos tenían pactado ese precio mínimo. Como hacia mucho calor y un alto grado de humedad (por encima del 90%) decidimos apoquinar para tener libertad de movimiento. La bici, con el calor agobiante, no era una opción aquí. Buena inversión. Creo que es de los sitios del mundo, que he visitado, mas espectaculares, a nivel paisajístico, para hacer excursiones en moto. Los niños encantados estrenando sus cascos del Decatlhon, que compramos para el viaje. Nos movíamos, con un mapa, por vías secundarias, donde apenas te cruzabas con un par de motos y algun moto-carro, (todos los "locals" usan los "speed ways" - autovías). Flipábamos con los paisajes de mogotes, rocas, el caudaloso rio Li y la densa vegetación. ¡Precioso!

El primer día paramos, casi por casualidad, en un sitio al lado de la carretera que tenía una especie de piscifactoría donde te pescabas tu pez y te lo cocinaban a la cerveza, especialidad típica de la zona, según descubrimos más tarde. Sólo tenían el menú escrito, en una pizarra, en chino, así que intercambiamos gestos: la señora nos enseño un pescado y una botella de Ching Tao (la cerveza local) y asentimos. El lugar era muy agradable, grande, con mesas repartidas a lo largo de un embarcadero. Solo había dos familias de chinos, a parte de nosotros, comiendo, así que fuimos la "atención" del lugar el tiempo que estuvimos allí. Los niños encantados con las cañas y el cebo de maiz. Ovbiamente, no conseguimos pescar nada (los peces estaban más que resabiados), asi que el dueño cogió un pez gordo, de una piscina más pequeña, con una red y nos lo cocinó. Estaba buenísimo, super sabroso, acierto total. Para los niños, la señora parecía sugerir otro plato de la pizarra, nos dejamos llevar y dijimos:"shi, shi" pero "bu yao la" (sin picante), la señora respondió algo que interpretamos como: "no pica". Resultó ser una empanada de huevo rellena de carne picada, les gustó mucho. Después de comer cayo un tremendo chaparrón, con rayos y truenos incluídos, y cuando paro, seguimos ruta con la tripa llena y muy contentos.



Otra excursión que nos encanto fue la de la cueva de Moon Hill. Después de perdernos varias veces con las motos y preguntar una y otra vez con el mapa, llegamos a la entrada de la cueva. Accedimos en barca al interior de la gruta, que es bastante grande, sólo provistos de cascos, bañadores y chanclas. Después de deambular 20 minutos por sus entrañas: arriba, abajo, "mind your head" (cuidado con los cocazos), nos sumergimos en una piscina de barro y, posteriormente, en una piscina de aguas termales que emanaban de la misma roca de la cueva. Fue alucinante bañarnos en el corazón de una cueva, con los murcielagos rondando, el agua sulfurosa calentita y milagrosamente SOLOS. No habia nadie. Fue una pasada. Nos gustó mucho a todos. Nunca había hecho nada similar dentro de una cueva, la verdad. 

Otro día, fuimos a visitar la "Silver Cave", la más grande de Yangshuo, muy bonita y espectacular, aunque tuve la impresión de que se habían pasado un poco con la adecuación para hacerla visitable. Parecía que la hubiesen atravesado con una tuneladora en linea recta, andábamos por un ancho camino asfaltado y con barandillas de hormigón. Toda la cueva esta iluminada con luces de neón, carteles luminosos y juegos cromáticos. Desde luego, algo diferente a lo que estamos acostumbrados en España. Perdí  la cuenta de los autobuses que entraban y salían del parking. La recepcionista del hotel me dijo que es la cueva mas visitada de la zona, me lo creo.


Otra excursión, muy divertida, fue la de ver como pescan por la noche  con cormoranes. Leímos que había extranjeros a los que les parecía una actividad cruel, no se, a nosotros para nada. Seis o siete cormoranes se suben en fila, voluntariamente, en la barca del pescador (es una estampa muy curiosa) y cuando llegan a la zona de pesca se lanzan, cual cohetes, al agua. Se comen todos los peces pequeños, los grandes se quedan atascados en su gaznate,  porque llevan una holgada cuerdecita atada en el cuello, y son los que el pescador echa en su cesta. Los cormoranes estaban rollizos, estaba claro que no pasaban hambre, y parecían en perfecta simbiosis con su dueño. Yo no vi ningún atisbo de crueldad, pero supongo que para gustos hay colores. A nosotros nos gustó mucho la experiencia de ver algo tan curioso, en el inmenso rio Li, en la oscuridad de la noche. Los niños fliparon, claro, y les hicimos unas fotos con los cormoranes.

En Yangshuo también fuimos una noche a ver un espectáculo sobre el río. Al parecer un famoso coreógrafo chino lo montó para los juegos olímpicos. Más de 500 personas participaban en este espectáculo recreando escenas de la vida rural china. Fue una pasada, un auténtico despliegue de luces, efectos, música, figurantes... y todo sobre el río. 



El resto de días los pasamos dando paseos por los alrededores, dándonos baños en la "playa" del pueblo, comiendo de lo lindo... Mateo tuvo una diarrea del viajero que rápidamente diagnosticó uno de nuestros nuevos amigos españoles del hotel, era médico. Llevábamos un botiquín super completo pero él prefirió recetarle un principio activo específico para la flora intestinal, así que introdujo el nombre de este principio activo en el traductor español-chino de San Google, imprimió el resultado y se fue a una farmacia del pueblo a comprarlo. La verdad es que tuvimos mucha suerte. El pobre Mateo estuvo los tres últimos días echo polvo con fiebre muy alta (nos dijo que era lo normal y que podía haberse contagiado por tocar algo y llevarse las manos a la boca, por comer algo en mal estado y no tener defensas por ser pequeño, ...) Siempre que pasan cosas así como padre te hace sentirte un poco culpable por pensar que está malito por nuestra "locura" de llevarlo a sitios remotos con sólo 5 años, pero luego vemos todo lo que están aprendiendo y viviendo nuestros hijos y piensas que es un "mal menor" y que también se ponen malitos cuando estamos en casa. Lo importante es saber gestionar las cosas cuando pasan y no agobiarse.

Si tuviera que elegir dos lugares a los que volver en China sin duda serían Pingyao y Yangshuo.

  MAKUTEROS FAMILY RUN - CAPITULO 7 - GUILIN - YANGSHUO

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